El serón de coles

Esta escena trata de transmitir al visitante la dureza de los inviernos serranos, y por lo tanto del trabajo de los agricultores de la zona en esa época del año. Tradicionalmente, las mujeres se ocupaban de las tareas del campo, mientras los hombres eran los encargados de atender el ganado.En la imagen, una mujer se protege de la ventisca mientras dirige al macho que, cargando un serón lleno de coles recién cogidas en un huerto cercano, sirve también de transporte para el hijo, que se intenta cobijar de la intemperie.

A nivel técnico, en esta pieza se logró la mayor expresividad usando la menor cantidad de recursos pictóricos, y explotando en mayor medida las propiedades del acero.